Sobre el Hermanamiento

lo que se le pide a Alburquerque y al resto de ciudades que quieren ayudar, no es una ayuda económica; se pretende hacer una presión internacional, que se demuestre su conocimiento fuera de Colombia y que llegue a oídos de todos. Pedir al gobierno colombiano y a todas las instituciones como la ONU que estén atentos para que no se produzca ninguna agresión a esta comunidad y a ninguna otra.”

Ángel Vadillo, Alcalde de Alburquerque

 

El Hermanamiento existente desde el 2006 entre Alburquerque y la Comunidad de Paz de San José supera el enfoque tradicional del hermanamiento, al generar espacios de diálogo entre instituciones municipales con diferentes capacidades y experiencias, permitiendo que el camino de aprendizaje no sea unidireccional, Es decir la horizontalidad en las relaciones ha suscitado un espacio de intercambio que enriquece las políticas de ambas partes y que supera la visión tradicional de donante-receptor.

Por un lado, durante todo este tiempo, el Ayuntamiento de Alburquerque no ha dejado de desarrollar acciones internacionales de acompañamiento promoción y protección a la Comunidad de Paz de san José, con el objetivo de contribuir a parar o disminuir la destructividad del conflicto y apoyar un cambio social que pueda llevar al establecimiento de unas nuevas relaciones constructivas, justas, inclusivas y sostenibles. Muchas de estas acciones de acompañamiento internacional están relacionadas con la diplomacia, la incidencia política, la protección y la sensibilización desde una mirada de construcción de paz, y se han basado en el envío de cartas y peticiones o suscripción de comunicados de apoyo y denuncia.

Como indica Jesús Emilio Tuberquia, uno de los representantes legales y líderes de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó los intereses económicos presentes en el territorio de la Comunidad de Paz, son múltiples “Hay petróleo, carbón, hay una reserva hídrica, mucha confluencia de aguas, muchísimos minerales, también es una despensa agrícola. Hay también muchos intereses sobre la producción de la coca y la marihuana [por los actores armados ilegales]. Esta zona estratégicamente la ha usado el narcotráfico. Es una zona muy productiva, apta para lo que uno quiera cultivar. Esto lleva al intercambio de armas y otros negocios que se generan alrededor del narcotráfico. Y los intereses no están únicamente acá en el corregimiento de San José de Apartadó sino rodeando estos tres departamentos, Chocó, Antioquia y Córdoba. Y nosotros vivimos entre estos límites. Aquí nace una centralidad de intereses, que son los que llevan a toda esta violencia que se ha generado, una confrontación de más de 30 años, y que causa la mayor afectación a nosotros, la población civil. Porque los intereses son los de expropiar el campesinado y desplazarlo.”

Por este motivo, los Hermanamientos se sitúan como una de las modalidades de Cooperación Descentralizada idóneas para incidir a favor de la construcción de la paz y trabajar en escenarios complejos, al ser los Ayuntamientos los actores más próximos a la ciudadanía y con mayor autonomía en relación a posibles condicionamientos políticos y comerciales institucionales. Ello les facilita superar, en ocasiones, los modelos clásicos de cooperación, profundizar en la coresponsabilidad de los países del norte con el futuro de los países del sur, así como construir redes y lazos horizontales entre pueblos, ya que sus características les permiten una mayor agilidad, flexibilidad y eficacia a la hora de generar relaciones.

Dentro del Hermanamiento de Alburquerque con la Comunidad de Paz de San José de Apartadó, se ha desarrollado además de la relación institucional con el Ayuntamiento de la localidad, un grupo de apoyo local a la Comunidad conformado por la mayor parte de asociaciones y colectivos del municipio. Lo que supone una promoción de la participación activa de la ciudadanía y de las entidades de la sociedad civil en las políticas y acciones de la cooperación al desarrollo local y permite reforzar la ciudadanía y la democracia local e incrementar la responsabilidad y la solidaridad de la sociedad con los problemas globales a través de una vía práctica.

Por su parte, San José de Apartadó es una comunidad que ha sido capaz de imaginar “un nuevo pacto fundacional” orientado a establecer reglas de la vida en común, eligiendo sus propias autoridades y representándose a sí misma en el contexto nacional e internacional. Emancipándose del orden estatal que los oprime, redescubren nuevas formas de producción de poder, al suscribir novedosos pactos sociales de democracia participativa, la Comunidad de Paz de San José de Apartado supone un modelo real, inspirador y alternativo de vida comunitaria.

“Esta es una comunidad que tiene ya importancia global. El mundo necesita de estas experiencias pequeñas que construyen otras formas de vivir. Hay muchos ojos y muchos corazones puestos aquí”
Gloria Cuartas, Fue alcaldesa de la ciudad de Apartadó

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