Las negociaciones en la cumbre de la ONU sobre cambio climático de Doha han concluido este sábado tras retrasarse la clausura debido a la falta de acuerdo a última hora del viernes como estaba prevista.
La Conferencia de las Partes de la Convención (COP18) llegó finalmente a un acuerdo para prorrogar hasta 2020 el conocido como Protocolo de Kioto para la reducción de gases de efecto invernadero. El acuerdo, conocido como Puerta Climática de Doha, supone prorrogar ocho años Kioto, el único tratado internacional vinculante para combatir el calentamiento global. Sin embargo, Rusia, Japón y Canadá, entre otros, no han accedido a este nuevo compromiso con lo que las emisiones de CO2 de los participantes suponen ahora apenas el 15 por ciento de las emisiones globales
Respecto a la Unión Europea (UE), se menciona que en su paquete energía-clima para el cumplimiento de sus objetivos de reducción de emisiones para el período 2013-2020 no está permitido el uso de estos excedentes.
Japón, Liechtenstein, Mónaco, Noruega y Suiza, también son mencionadas en este punto y tampoco comerciarán con los excedentes de emisiones.
Acuerdo insuficiente
El acuerdo alcanzado en Doha aplaza además hasta 2013 las negociaciones sobre la demanda de los países en vías de desarrollo, que exigen mayores donaciones para ayudarles a frenar las emisiones de gases de efecto invernadero. Todas las delegaciones presentes en Doha han reconocido que el acuerdo final no satisface las recomendaciones de los científicos, que pedían medidas drásticas para evitar un calentamiento que provoca olas de calor, tormentas de arena, inundaciones, sequías o la subida de los niveles del mar.
Durante las reuniones celebradas a contrarreloj se han estudiado, asimismo, las propuestas del grupo sobre la Convención, así como las relacionados con avances en la Plataforma de Durban.
Igualmente, se ha puesto sobre la mesa una plan para hacer frente a las pérdidas y daños asociados con impactos del cambio climático en los países en desarrollo que son especialmente vulnerables, con el objetivo de mejorar su capacidad de adaptación.
Por otro lado, hay avances en el programa de trabajo sobre financiación a largo plazo y en un informe del Fondo Verde para el Clima.
Fuente: El diario.es